Lo decía la directora del Centro Bibliotecario de Puente Alto, Sabina Gálvez; Puente Alto cuenta con una biblioteca que enorgullece a sus habitantes, con aproximadamente 14 mil usuarios activos. Sin embargo, la cifra es insuficiente si se considera que son unos 600 mil los puentealtinos. Con esta ecuación en mente, la Dirección de Bibliotecas, Archivos y Museos (Dibam), a través de su programa [!N:www.bibliometro.cl/ [!b:Bibliometro]] y en alianza cultural con Metro de Santiago, inauguró el pasado sábado 16 de diciembre dos nuevos puntos de préstamo en estaciones. Uno en Tobalaba. El otro, claro, en Plaza Puente Alto. Al ritmo de modernas cuecas entonadas por el sexteto femenino Las Capitalinas, los vecinos de Puente Alto despertaron contando con el Bibliometro número 10, número al que se suma el [!n:www.bibliometro.cl/visor_galeria.asp?prmId=7 [!b:Bibliotren]] ubicado en los jardines de la [!N:www.dibam.cl/biblioteca_nacional/ [!b:Biblioteca Nacional]]. La noticia es de relevancia para una de las comunas más grandes de Chile, cuyos índices de delincuencia llaman a la constante estigmatización por parte de los medios de comunicación. "Estamos cumpliendo así una tarea central para el gobierno de Michelle Bachelet, cual es contribuir al acceso equitativo de todos los chilenos y chilenas a la lectura de libros", subrayó la directora de la Dibam, Nivia Palma. "Leer libros contribuye decididamente a desarrollar la imaginación y creatividad de las personas, a conocer y apropiarse de la lengua propia con la cual hemos crecido y a desarrollar nuestra capacidad expresiva y crítica. Por eso no es un tema menor el cuantas personas leen y cómo contribuimos a que las personas accedan a los libros. Como lo ha manifestado la Unesco, las bibliotecas cumplen un papel fundamental, que es la democratización del acceso de las personas a los libros. Por eso estamos aquí hoy, a pesar de todo lo que se diga, los chilenos y chilenas estamos leyendo más". Ricardo López, máximo responsable de la [!N:www.dibam.cl/bibliotecas_publicas/ [!b:Subdirección de Bibliotecas Públicas]], añadió: "Hay que ser justos; Puente Alto es un espacio de lectura desde antes de que se creara este Bibliometro, con una excelente biblioteca pública y excelentes bibliotecas escolares. Esta es una comuna donde se lee y donde hay sectores de pobreza relevantes, para paliar eso ofrecemos lectura gratuita para los menores de 18 años y el adulto mayor, mientras que los que están entre esas edades deben cancelar sólo 3 mil pesos anuales. En rigor es un servicio gratuito". Fue álvaro Caballero, gerente comercial de Metro de Santiago, quien sintetizó de la mejor manera lo que ha sido esta iniciativa: "Llevamos 10 años en este proyecto que en sus inicios parecía una locura, nos decían que probablemente la gente no devolvería los libros. Hoy, Bibliometro tiene la tasa más baja de pérdida de libros que hay en el país. Tenemos 24 mil socios activos, hemos prestado 1 millón 300 mil libros... si pusiésemos un ejemplar sobre otro podríamos tener un edificio de 26 kilómetros. Queremos hacernos cargo no sólo del viaje físico, también de ese viaje espiritual que todos hacemos cuando viajamos en metro. Estoy seguro de que en estos 10 años y a través de los libros entregamos a muchas personas la capacidad de soñar e imaginarse un futuro distinto. Tal vez a través de ese gesto los ayudamos a configurar lo que son hoy como personas". A los más de 1000 títulos que ofrecen estos dos nuevos Bibliometro, se suma el acceso a Internet gratuito y un catálogo en línea en [!N:www.bibliometro.cl [!b:www.bibliometro.cl]] A diez años de su puesta en marcha, el servicio cuenta con 90 mil socios. Durante el 2006 ya ha realizado más de 124 mil préstamos, mientras que en una década se han prestado un millón 300 mil libros. Es un programa tan exitoso que fue imitado en España y es el modelo del Bibliometro de Madrid que se inauguró el año pasado. Por su parte, en Chile seguirá creciendo y durante el 2007 la estación Américo Vespucio Norte tendrá su propio Bibliometro, facilitando el acceso a la lectura a más y más chilenos y chilenas.