La Dirección de Bibliotecas, Archivos y Museos (Dibam) y la Dirección Zonal de Pesca darán inicio este 11 de julio a la iniciativa que pretende llenar de historias la vida de los pescadores magallánicos en alta mar, durante la temporada extractiva de la centolla.
En un principio serán 20 las embarcaciones que llevarán consigo mini bibliotecas, pero el plan contempla ampliarse y abarcar a un total de 300 naves. También se incorpora el acercamiento de los pescadores a las bibliotecas públicas de la Región de Magallanes. En ellas serán inscritos como usuarios y podrán solicitar préstamos.
Los pescadores, que durante la temporada de centolla suelen pasar varios meses en alta mar sin posibilidades de volver a tierra firme, recibirán las mini bibliotecas el lunes 11 a las 16 horas en el terminal pesquero de Barranco Amarillo.